
Las pequeñas y medianas empresas (Pymes) son una parte fundamental de la economía europea, en la creación de empleo y la generación de valor.
Según la definición de la Comisión Europea, las pymes son empresas con menos de 250 empleados y un volumen de negocios anual inferior a 50 millones de euros o un balance general inferior a 43 millones de euros.
Según el Informe anual de la Comisión Europea sobre las pymes europeas, en 2023, aproximadamente 25,8 millones de pymes operaban en la UE-27, lo que representa un asombroso 99,8% de todas las empresas del sector empresarial no financiero (SNF).
Estas pymes otorgaron empleo a 88,7 millones de personas (65,2% del total), lo que pone de manifiesto su importancia en el mercado laboral.
Aunque las pymes constituyen casi todas las empresas del sector empresarial no financiero, representan poco más de la mitad de su valor añadido. Esto se debe a que las empresas más grandes se benefician de economías de escala, que les permiten producir bienes y servicios de forma más eficiente y a un menor costo por unidad, publica Statista de España.
En consecuencia, las grandes empresas generan más valor añadido que sus homólogas más pequeñas. A pesar de ello, las pymes desempeñan un papel crucial en la diversidad económica, la innovación y la resiliencia.
Según los expertos, las pequeñas y medianas empresas proporcionan modelos empresariales flexibles que pueden satisfacer las demandas de nichos de mercado y contribuir a las economías locales.-