En el comienzo de año es momento de planificar y organizar el devenir de los próximos meses. Además es importante plantearnos objetivos personales, es esencial diseñar nuestro esquema financiero para transitar sin problemas la economía personal, profesional y familiar.
Lo aconsejable es pensar y plasmar en una planilla de excel un recorrido de cuáles son día a día nuestros ingresos (discriminando por fuente), nuestros gastos fijos (alquileres, cuota de colegio, obra social), gastos extraordinarios (vacaciones, compra de electrodomésticos, arreglos del auto) y gastos hormiga (pequeños consumos en el kiosco, salidas, entre otras).
Parece más tedioso de lo que verdaderamente es, así que es una tarea rápida y sencilla. Por eso, otro consejo es configurar una alarma para hacer el ejercicio de completar la planilla, no vas a tardar más de 4 minutos diarios y tu bolsillo lo agradecerá.
La importancia del excel no solamente es la de organizarse sino también la de conocer gastos que hoy en día no te das cuenta que estás ejecutando.
Una vez que finalizamos este proceso, es clave determinar y anotar nuestros objetivos financieros para luego presupuestarlos.
Veamos un ejemplo: si mi meta es comprar un primer automóvil, analizando el mercado hago una estimación, y veo que preciso alrededor de 600.000 pesos. Una vez definido y establecido este objetivo, y habiendo planificado en el correspondiente excel ingresos y gastos totales, puedo concluir mi posibilidad de ahorro y fijar cuánto tiempo me demoraré en cumplir mi objetivo.
Nuevamente, la relevancia de sentar un objetivo no es solamente la de saber cuánto tardaré en realizarlo sino también la de incentivarse psicológicamente.
Lo que vimos hasta acá es el ABC de la planificación financiera. Consiste básicamente en tomar conciencia de nuestros ingresos y todo tipo de gastos, volcarlos en una planilla e instaurar objetivos económicos. Ahora bien, puede que la situación se torne un poco más compleja.
En Argentina, hay un porcentaje creciente de individuos, familias y negocios con deudas. Esta situación puede alterar la guía que comentamos al principio del artículo, ya que en estas circunstancias la planificación es un deber.
En consecuencia, aquí van unos tips para tu planificación financiera:
1. El primer consejo que desde estas líneas nos aventuramos a esbozar es la institución de metas financieras, es decir, colocar objetivos no solo en términos de la cantidad de dinero que te gustaría ahorrar sino también de bienes o servicios que te gustaría adquirir. Puede ser tu primer automóvil, un viaje con tu familia o también una mudanza de hogar. La importancia de este tip es la organización que te permite y el incentivo psicológico de tener un punto de llegada.
2. La regla del 50/30/20. Una vez que estructuremos nuestro presupuesto, es decir, conozcamos exactamente todas nuestras fuentes de ingresos y nuestros gastos totales, debemos avanzar hacia este mandamiento de las finanzas personales.
Consiste en respetar un esquema de gasto/ahorro. De nuestros ingresos totales vamos a destinar un 50% a gastos fijos (cuota escolar, alquileres, obra social), un 30% a gastos hormiga y extraordinarios (Arreglos circunstanciales, gastos en salidas, esparcimiento, ocio etc) y un 20% vamos a ahorrarlo.
De esta manera y respetando este organigrama financiero vamos a conseguir establecer un patrimonio de respaldo para luego avanzar a la posibilidad de realizar inversiones, de constituir un fondo de emergencia o también, si es que tenemos, saldar deudas.
3. En Argentina, hay un porcentaje creciente de individuos, familias y negocios con deudas. El primer paso para poder resolver el déficit en nuestras cuentas es asumir la situación y conocer exactamente cuánto debemos.
El segundo paso es evitar el efecto “bola de nieve” y financiar deuda con más deuda, hábito recurrente. Para eso es central recortar o eliminar el uso de tarjetas de crédito. En anexo a este tip, es importante a la hora de hacer nuestras compras pagar en efectivo. La razón es esencialmente psicológica, ya que muchos estudios han demostrado que cuando uno abona en “cash” tiende a ahorrar y evitar la compra impulsiva.
4. Otro consejo que nos resulta relevante esta vinculado al punto de partida. Es central que comprender que el habito de la planificación financiera y el ahorro acaba de comenzar. No se dejen engañar por la típica frase de “arranco el mes que viene”, “cuando terminen las vacaciones” o “cuando logre ganar más dinero”. Se sorprenderán cuando comiencen a tener un riguroso control de sus gastos, cuantos de estos pueden recortar y comenzar a aplicar la regla del 50/30/20.
5. Crear nuevas fuentes de ingresos. A la hora de la organizarnos financieramente, estableciendo metas y llevando registros, es crucial recortar los gastos pero también aumentar los ingresos. Para satisfacer este ultimo punto pueden acudir a la inversión (fondos de inversión, Bolsa de Valores, entre otros). O también apelar a realizar ciertos trabajos que uno puede hacer en su tiempo libre por Internet, como la venta de productos (Dropshipping), venta de cursos, venta de contenido online, etcétera.
En resumen, primer paso para poder resolver el déficit en nuestras cuentas es asumir la situación y conocer exactamente cuánto debemos. El segundo paso es evitar el efecto “bola de nieve” y financiar deuda con más deuda, hábito recurrente. Para eso es central recortar o eliminar el uso de tarjetas de crédito. El tercer paso es ajustar los gastos fijos y hormiga para constituir un fondo de emergencia en moneda dura para afrontar la deuda en un plan de pagos.
Todo el recorrido que hicimos en este artículo es de suma importancia para crecer y poder ir por nuevas metas que habiliten nuestro desarrollo personal y profesional. Más aún, en un país como Argentina, donde ya contamos una situación de incertidumbre estructural que debemos contrarrestar con una formidable organización y planificación personal.-
(*) Experto en Finanzas e inversiones y CEO en Academerval.