Un nuevo estudio de Accenture demostró que las pequeñas empresas de Consumo Masivo no solo han acaparado la mayor parte del crecimiento de la industria desde 2010 (67%), sino que ahora son los actores dominantes en el mercado global, con una cuota del 40%.
Según el informe, esta es una realidad aleccionadora para los gigantes de la industria que han visto cómo su participación colectiva en el mercado ha caído del 42% en 2010 al 37% en 2019.
Si esta tendencia se mantiene, los grandes actores del sector de Consumo Masivo -los que tienen más de u$s15.000 millones de ingresos anuales- representarán menos de un tercio del mercado en 2030.
«Esto sucede porque, a pesar de los profundos cambios en la forma de pensar y actuar de los consumidores, los modelos de negocio de muchas marcas globales no han cambiado en gran medida», detalla el informe.
“Tomando en cuenta las industrias de Consumo Masivo en Argentina, los márgenes son demasiado ajustados, y los últimos años tuvieron más foco en transformaciones habilitadoras de negocio, como por ejemplo actualizaciones indispensables de soluciones tecnológicas (i.e. reemplazo de ERP (sistemas de gestión empresarial), CRM (sistemas de gestión comercial) u otros World Class) e iniciativas de reducción de costos en distintas áreas funcionales como Finanzas y Administración, Supply Chain, entre otros», dice Julián Miguez, director ejecutivo de Consumo Masivo y Retail para Accenture Argentina.
Y agrega: «En general, este tipo de iniciativas, fueron priorizadas respecto a las más innovadoras de transformación digital, que implican la implementación de nuevos modelos de negocio como ser B2C (suscripciones, quédate en casa, entre otras)”.
Además acota que “las marcas de Consumo Masivo que más crecen son las que ofrecen nuevas formas de conveniencia, descubrimiento, personalización y propósito. No es casualidad que desde 2018, se haya producido un salto del 67% en la adopción de modelos de negocio que atienden a prioridades como la suscripción, la creación de quédate en casa y las plataformas para compartir (uberización)”.
Sin embargo, detalla que hay compañías globales más descentralizadas en cuanto a su poder de decisión e implementación de iniciativas innovadoras, que lograron transformar sus modelos de negocio, atendiendo las necesidades del consumidor local.
Por mencionar un ejemplo, una compañía global de consumo masivo de bebidas ofrece en Argentina distintos canales de interacción B2C.
El reporte indica también que los inversionistas están optando por nuevos modelos de negocio.
Los inversores de capital de riesgo ven los nuevos modelos como el futuro. De esa forma, 85% de los 20.000 millones de dólares en financiamiento global de VC en CPG durante entre 2014 y 2020 se destinaron a modelos de negocio basados en plataformas.
“La mayoría de los grandes CPG saben que necesitan invertir en nuevos modelos de negocio para acelerar el crecimiento, lo que supone un gran cambio para el sector. Para esto, hay tres elementos fundamentales. Primero, tener una visión holística. Considerar el amplio valor que el nuevo modelo de negocio puede aportar a la empresa, los consumidores, los inversores, los socios y el planeta. Se trata de un valor de 360°. Segundo, cumplir con objetivos medioambientales, capturar datos de primera mano para transformar las interacciones de los consumidores. O mejorar la vida de las comunidades en las que operan las empresas son sólo algunos ejemplos de este tipo de valor”, acota Miguez.
Y concluye que “otro elemento clave es que no se debe ver el nuevo modelo de negocio como otro canal más. Para que los nuevos modelos de negocio impulsen realmente crecimiento, deben crear una experiencia de marca única que no existe en ningún otro lugar y que esté disponible de forma integral en todos los puntos de contacto y los canales. Finalmente, se debe ir más allá del crecimiento inorgánico e impulsar un músculo de crecimiento a través de las fusiones y adquisiciones”.-