La brecha de precios entre lo que se le abona al productor y lo que paga el consumidor, para el promedio de los 24 principales alimentos agropecuarios que participan de la mesa familiar, aumentó 8,7% en abril, al subir de 4,29 veces en marzo a 4,67 veces del mes anterior, afirma la CAME en un informe.
La desmejora se explica por una caída de 3,7% en los precios al productor y un incremento de 1,63% en el costo que pagó el consumidor en comercios de cercanía.
En especial, la zanahoria y calabaza fueron los productos con más brecha. En tanto, acelga, huevo y pollo, los de menos.
En resumen, la diferencia de precios entre lo que pagó el consumidor y lo que recibió el productor en el campo por sus alimentos agropecuarios subió 8,7% en abril.
La variación fue impulsada por una caída de 3,74% en los desembolsos al productor, mientras que los costos al consumidor tuvieron una suba de 1,63% en los comercios pymes de cercanía y una baja de 0,44% en los hipermercados.
Así, en abril, para los 24 agroalimentos de consumo familiar relevados, los consumidores pagaron en promedio 4,67 veces más de lo que cobró el productor en la tranquera de sus chacras. En marzo esa desigualdad fue de 4,29 veces y en febrero de 4,42 veces.
Los productos con mayor suba mensual en sus brechas fueron: naranja, con un alza de 86,5%, limón (+83,3%), repollo (+23,3%) y zanahoria (+22,5%).
Los de mayores bajas fueron tomate y mandarina (ambos descendieron 13,4%), y calabaza (-11,5%).
Los datos surgen del Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) que elabora el sector de Economías Regionales de CAME en base a los precios de origen de las principales zonas de producción y a más de 700 precios de cada producto en destino.
Los mismos fueron relevados no sólo en verdulerías y mercados por un equipo de 30 encuestadores, sino también mediante un monitoreo de los importes online de los principales hipermercados del país, durante la segunda quincena del mes. –